La esencia innovadora, visionaria y apasionada de un grupo de emprendedores del sector salud es el secreto detrás de la creación de Clínica del Bosque, un proyecto único en el país que integra, bajo un mismo techo, diversas especialidades médicas para el manejo personalizado e interdisciplinario de la salud de niños y adolescentes, desde el nacimiento hasta la juventud, enfocado en cuidado de la vía respiratoria superior.
Este innovador concepto boutique nació del sueño de la odontopediatra Adriana Vargas, la otorrinolaringóloga pediátrica Adriana Vega y el otorrinolaringólogo Eduardo Cordero, socios y cofundadores, quienes vieron la necesidad de crear un espacio seguro, integral y adaptado a las distintas etapas de crecimiento de sus pacientes.
“El Bosque es más que un nombre; representa la evolución de nuestro sueño. Empezamos como una tierra fértil para niños pequeños, y con los años, hemos crecido junto a ellos hasta formar un bosque donde familias, niños y jóvenes encuentran cuidado especializado, calidez y confianza. Aunque en un principio nos veíamos como un lugar enfocado en niños pequeños, sus propias necesidades al crecer nos impulsaron a seguirles acompañando en su salud a través de los años”, explicó Vargas.
La propuesta, desarrollada durante un año y medio y ubicada en EcoPlaza, reúne a profesionales como la pediatra Gabriela Mazariegos y la nutricionista pediátrica Marisol Chavarría, así como terapeutas de lenguaje y motricidad orofacial. El modelo permite un manejo integral y de la vía respiratoria superior, con la flexibilidad de sumar nuevas especialidades afines y alianzas estratégicas para ampliar el alcance de la atenciónn.
Con una inversión que supera el medio millón de dólares, 110 metros cuadrados de infraestructura y la creación de 10 empleos directos, Clínica del Bosque no solo se posiciona como pionera en el país en este tipo de atención boutique interdisciplinaria, sino que también impulsa un ecosistema de negocios aliados en su entorno.
El diseño del espacio, a cargo de la arquitecta Marcela Carranza, fue concebido para ofrecer una experiencia acogedora y estimulante tanto para un bebé como para un adulto joven, inspirada por supuesto en el concepto del bosque que es parte de la esencia de la clínica.
“Queríamos que el lugar transmitiera la esencia de nuestro concepto: calidez, naturaleza y un sentido profundo de cuidado. Aquí no solo se atienden síntomas; se acompaña el desarrollo integral, la autoestima y el bienestar emocional de cada paciente”, agregó Vargas.
Por otro lado, más allá de la innovación en su modelo de atención, Clínica del Bosque mantiene un fuerte compromiso con la experiencia humana.
“Nuestro equipo está conformado por profesionales que no solo destacan por su formación, sino por su pasión y espíritu de servicio. Creemos que la salud es un proceso que se construye en comunidad, y por eso, estos valores fueron claves al definir el equipo de trabajo y los colaboradores de la clínica”, señaló la fundadora.
La clínica cuenta con cuatro consultorios y un enfoque que combina tecnología, personalización y un ambiente inspirador para que cada paciente se sienta escuchado, amado y acompañado en su proceso de crecimiento.
Clínica El Bosque está realizando su apertura oficial durante este mes de agosto, atiende niños y niñas desde los 0 años y hasta la etapa adulta, y en el corto plazo aspira a compartir su propuesta con más pacientes y seguir ampliando su oferta de especialidades como neumología, neurodesarrollo y psicología para una atención cada vez más integrativa.
“Con esta apertura, el equipo de Clínica El Bosque reafirma su propósito: ofrecer una atención que inspire confianza, que fomente el valor de la naturaleza y promueva una salud integral para las nuevas generaciones. Trabajamos con una razón de ser que va más allá de la visión comercial; la innovación y la creatividad son parte de nuestra esencia de negocio, la atención es totalmente boutique y personalizada”, finalizó.