En el marco del Mes Internacional de los Océanos, Panamá reafirma su compromiso con la conservación marina y abre sus puertas al turismo para explorar su mar Caribe y océano Pacífico, interactuando con ríos, manglares y vías fluviales. Según el fondo de Promoción Turística (Promtur) estas son solo algunas de las razones por las cuales este destino debería estar en la lista de los turistas interesados en explorar y preservar la belleza de algunos de los recursos más preciados del planeta.
De acuerdo con datos de la Autoridad de Turismo de Panamá, en los primeros meses del año el ingreso general turístico alcanzó los US$1.023 millones, lo cual representa un 5.6% más en comparación con el mismo período del año pasado.
En este contexto, el turismo sostenible se convierte en un catalizador relevante de la economía y Panamá realiza esfuerzos para ofrecer experiencias enriquecedoras e inmersivas que generen conciencia en el visitante sobre la importancia de preservar el medioambiente. Para la nación panameña, el mar es parte de su historia y futuro, por lo que no sólo celebran sus océanos en junio, sino que también tienen su propio Mes Nacional de los Océanos de Panamá (septiembre).
Las 1.800 millas de costa panameña ofrecen al turista un sinfín de atracciones oceánicas entre las que destacan:
- Canal de Panamá: aplicando las recomendaciones de velocidad y tráfico establecidas por la Organización Marítima Internacional (OMI), tiene como objetivo proteger ballenas, delfines y otros animales acuáticos durante su migración estacional.
- Parque Nacional Coiba: un destino de buceo de clase mundial con 760 especies de peces marinos, 33 especies de tiburones y 20 especies de cetáceos. Declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO. Incluso, alberga una de las 12 estaciones del Smithsonian Tropical Research Institute, permitiendo estudiar la evolución, el cambio climático y los efectos del impacto humano en los ecosistemas caribeños.
- Bocas del Toro: destacado por los esfuerzos continuos de rehabilitación de arrecifes de coral. Con nueve islas principales en el Mar Caribe, alberga el 95% de las especies de coral del Caribe y el primer “Hope Spot” de Mission Blue en Panamá, un programa de rehabilitación y preservación marina.
- Parque Nacional Marino Bastimento: primer parque marino de Panamá. Alberga los arrecifes de coral mejor conservados a lo largo de la costa caribeña, convirtiéndolo en un excelente destino para el buceo y el esnórquel. Los esfuerzos de conservación se centran en las tortugas carey y las tortugas laúd, donde el trabajo colaborativo con el pueblo indígena Ngäbe-Buglé juega un papel fundamental para la vigilancia de los sitios de anidación.
- Golfo de Chiriquí: con extensos manglares ricos en vida marina.
Líder global en temas de conservación marina
El país ha superado los objetivos internacionales de protección marina al salvaguardar 50% de su área marina total; además, es uno de los tres países del mundo con emisiones de carbono negativas y el Parque Nacional Coiba mantiene el prestigioso estatus “Blue Spark” del Instituto de Conservación Marina, destacando los esfuerzos continuos para preservar sus prístinos ecosistemas marinos.
El innovador sistema de gestión de residuos “Wanda Díaz” que combina Inteligencia Artificial, energía hidráulica y paneles solares para eliminar los residuos sólidos de las aguas panameñas, es otra de las iniciativas sostenibles que se implementan activamente para la protección de los entornos marinos. El país elaboró el Plan de Acción Nacional sobre Basura Marina 2022-2027, destinado a reducir la contaminación marina, cuyo desarrollo tuvo la participación de diferentes actores nacionales e internacionales.
Adicionalmente, el país es parte de Pacto Azul, una nueva iniciativa medioambiental que fomenta un enfoque colaborativo hacia el turismo sostenible, buscando proteger los recursos marinos costeros y desarrollar capacidades de turismo regenerativo que beneficien a las comunidades costeras nativas. Este pacto exige a las empresas del sector turístico que apliquen prácticas sostenibles y regenerativas; las comunidades locales participan activamente expresando sus preocupaciones medioambientales y tomando parte en soluciones activas; y los turistas practican métodos responsables de viaje.
Panamá se presenta como un destino que combina la belleza natural excepcional con un compromiso real con la preservación de los océanos. El Mes Internacional de los Océanos es la ocasión perfecta para explorar este paraíso ecológico y sumergirse en experiencias que marcan la diferencia en la conservación marina mundial.