Con el uso que se le da a la inteligencia artificial en estos últimos años, comenzó a insertarse cada vez más en la diaria de las personas, a tal punto que se la usa para charlar, discutir y hacerle preguntas. Es en esta oportunidad que le consultó acerca de la carrera universitarias más difícil y exigente.
Por un lado, se le consultó a ChatGPT, el chatbot de IA, así como también a Copilot, el asistente de IA de Microsoft 365. Ambas herramientas exploraron entre las profesiones más demandantes y complejas, y ambas coincidieron en que hoy por hoy es Medicina.
“La dificultad de las carreras universitarias puede variar según la perspectiva y las habilidades de cada estudiante”, analizó Copilot.
Fue en este sentido que enumeró algunas bastante desafiantes:
Ingeniería de la Computación: sus estudiantes toman cursos de matemáticas avanzadas, algoritmos y estadísticas, pero, y aunque es difícil, los graduados a menudo tienen carreras lucrativas.
Ingeniería Aeronáutica y Aeroespacial: requiere un perfil analítico, pasión por la física y las matemáticas, y afinidad por la tecnología y la mecánica. A pesar de su dificultad, tiene una baja tasa de abandono.
Ingeniería Civil: los cálculos complejos y la responsabilidad de proyectar obras públicas hacen que esta carrera sea desafiante. La responsabilidad social también influye en la tasa de abandono.
Matemáticas: tiene una alta nota de corte y es considerada una de las más difíciles. Requiere sólidos conocimientos matemáticos.
Medicina: por último, nombró esta carrera. Si bien no está dentro de las ingenierías, es una profesión muy rigurosa y demandante.
ChatGPT coincidió bastante con este listado, sumándole el de Física Teórica. Pero, de cualquier manera, ambas apuntaron a que la Medicina es frecuentemente citada como una de las carreras más difíciles por la enorme cantidad de información que los estudiantes deben dominar en varios años.
Resaltaron en la complejidad de los conceptos médicos y, así también, la aplicación en la práctica de estos conocimientos. Al final del día, el médico es el que determina el futuro de un paciente. “La responsabilidad de cuidar la salud de las personas agrega un nivel adicional de presión”, señaló Copilot.