La revista Nature Synthesis publicó la investigación realizada por científicos de la Universidad de Ciencia y Tecnología de China en Hefei, liderados por Jun Jiang, en la que crearon un robot capaz de liberar oxígeno del agua, lo que podría significar que en futuras misiones a Marte los astronautas no tendrían que llevar el oxígeno desde la Tierra, sino que podrían crearlo allí mismo.
La investigación se realizó con una máquina móvil equipada con un brazo robótico para analizar meteoritos provenientes de Marte, el objetivo era saber si la máquina podía producir catalizadores útiles a partir de ese material. El sistema, que fue potencializado con inteligencia artificial, primero separó los materiales, y luego analizó los compuestos, buscando entre más de 3.7 millones de fórmulas un químico que fuera capaz de descomponer el agua para liberar el oxígeno. Según los investigadores, este proceso se pudo llevar a cabo gracias a la IA, ya que un científico humano se hubiera tardado 2.000 años en lograr esa investigación. Según Jiang, por cada metro cuadrado de material marciano, el sistema podría generar casi 60 gramos de oxígeno por hora, para entender esta cantidad, se debe tomar en cuenta que una persona en un estado tranquilo podría utilizar unos 10 gramos por hora. Además, Jun Jiang indicó que el sistema creado puede emplearse para producir otros productos químicos como fertilizante para plantas, y que este podría ser utilizado en otros tipos de suelos como el lunar.
Pero la NASA también ha avanzado en el tema de creación de oxígeno, el experimento de nombre MOXIE (Experimento de Utilización de Recursos In-Situ de Oxígeno en Marte) a cargo de Michael Hecht, que aterrizó en Marte en el 2021, a bordo del Perseverance de la NASA, produjo oxígeno a partir del aire marciano exitosamente. En Marte, la composición atmosférica constituye un 96% de dióxido de carbono aproximadamente, y según la NASA, el robot fue diseñado para producir solamente entre 6 y 12 gramos de oxígeno por hora, esto debido a que se necesita mucha energía para separar las moléculas de dióxido de carbono, y el rover Perseverance solo produce 100 vatios. En condiciones reales para enviar astronautas a Marte, se necesitarían por lo menos unas 30 toneladas de oxígeno, lo que se lograría con una central eléctrica que produzca unos 30.000 vatios. El oxígeno creado, según indicaron en la NASA, se dividiría entre unas 2 y 3 toneladas para el oxígeno de los tripulantes durante 18 meses, y de 25 a 30 toneladas para el cohete que los traería de vuelta a la Tierra, ya que para que el combustible arda, también se necesita de oxígeno, y debido a que el oxígeno pesa más que el propio combustible, llevarlo a otro planeta se dificulta mucho, siendo más conveniente fabricarlo allá mismo.
Ambas investigaciones dan grandes pasos en la tecnología más adecuada y rentable para futuras misiones a Marte, en comparación, el sistema creado por el equipo de Jun Jiang, aunque produce más oxígeno en menos tiempo, tiene el inconveniente de que necesita de agua, el cual no se consigue tan fácilmente en Marte, y en el caso del MOXIE, aunque por ahora solo es un “Tech Demo”, entrega información gracias a los sensores y controles que lleva, lo cual brinda datos para la creación de tecnología más avanzada que permita futuras tripulaciones de astronautas a Marte.