Con mucha frecuencia la presión alta no presenta síntomas significativos y es por eso que casi la mitad de las personas con hipertensión, desconocen que tienen este padecimiento. La sintomatología como dolor de cabeza, fatiga, mareos, visión borrosa o cambios en el ritmo cardiaco, suelen ser ignorados por las personas o atribuidos a otras causas.
Apenas el 21% de los adultos hipertensos, es decir, uno de cada cinco, tiene controlado el problema. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) la hipertensión es un “asesino silencioso” y es una de las principales causas de muerte prematura en el mundo.
Ante un diagnóstico de hipertensión, la recomendación médica primaria es el cambio en el estilo de vida, para aumentar la actividad física, bajar de peso y comer balanceado. También se inicia el tratamiento farmacológico con el fin de evitar los daños que genera la presión arterial.
Sin embargo, el doctor Luis Calvo Bolaños, Máster en investigación en salud, alerta sobre algunas malas prácticas que podrían provocar un retroceso en el tratamiento de la hipertensión, como por ejemplo, reducir las dosis al sentir mejoría, dejar de tomar el medicamento o tomar el de alguien más; o bien, esperar recuperación sin cambiar de hábitos. “Dado que los pacientes hipertensos no sienten dolor o algún síntoma permanente, tienden a suspender el medicamento o a cambiar las dosis, siendo ésta una de las principales causas de complicaciones de la hipertensión, como lo pueden ser los accidentes cerebrovasculares”.
Es importante que las personas mantengan un control constante, ya que la hipertensión es una enfermedad progresiva y el riesgo de padecerla aumenta con la edad. Entre las recomendaciones de cambio de hábitos están:
- Al menos dos horas de actividad física moderada a la semana
- Bajar de peso
- Reducir la cantidad de sal en su dieta
- Incluir frutas, verduras y productos lácteos bajos en grasa.
- Dejar de fumar
- Limitar el consumo de alcohol.
Victoria Brenes, Directora Ejecutiva de la Federación de Laboratorios Farmacéuticos de Centroamérica y el Caribe, Fedefarma, insta a la población a monitorear y chequear al menos una vez al año su estado de salud, y ante un diagnóstico de hipertensión tomar los tratamientos de manera responsable. “La prevención de la hipertensión está al alcance de todos, pero más allá de eso, es importante cumplir con las indicaciones médicas para el control de la presión, con el fin de evitar que se agrave la condición”
La OMS ha clasificado la hipertensión como un problema masivo de salud y por eso busca que la prevención y el control abarque a toda la sociedad a través de políticas y acciones multisectoriales, que van desde empoderar a las personas hasta fortalecer la atención primaria, ya que en muchos casos es el punto de entrada al sistema sanitario.
Prevenir y detectar oportunamente la hipertensión es parte de las intervenciones más eficaces en relación con la atención de la salud. Se estima que los beneficios económicos de programas de tratamiento de la hipertensión arterial adecuados superan los costos en una proporción aproximada de 18 a 1.